Yo creo que esta semana se puede definir así. Después de todo, comenzó con el escándalo del bendito panfleto que si lo habían visto los niños, que si no. Gente, si los profesores lo tienen en el salón y los entrenan con él. ¿Qué más esperamos? Los niños podrán no verlo pero serán influenciados por sus negativas vibraciones por decirle de alguna manera. Hay que tener cuidado con enseñar algo y permisividad.
Por otro lado, estalló un tanque de gas en Las Flores! Como me dijo hoy alguien !ése es mi wing¡ (parece que no ha ido por ahí esta semana). Y se imaginan la corredera que se formó, ni a los bomberos ni ambulancias ni mucho menos a los noticieros esperaron los clientes...debe haber sido hilarante!
Ahora, fuera de tema, pero pensando en cosas más serias ¿porqué iiiiiii los carros de Panamá se desembarcan en Colón si la mayoría se venden en la capital? ¿no hay puertos en el Pacífico? (chiste cruel, Balboa completa parece un puerto, cualquier dia los contendores llegan al Edificio de la Administración del Canal). Las especificaciones dicen no correr a más de X kilómetros los primeros mil y Dios mío, esos tipos vienen desde Colón como alma que lleva el diablo.
Cuando se fue el ferrocarril la excusa era que no había otra manera ¿y ahora que regresó? Necesitamos que traigan a Ultra Magnus y carguen los carros en él, que ellos quieren viajar bien cómodos. En Panamá los únicos carros que viajan como reina del carnaval son los carros viejos (incluyendo el mío) cuando les ha dado una "espuma" (creo que así es que le dicen ahora a los derrames cerebrales) en la mitad de la calle o se chocaron y en cambio los nuevos, son maltratados por bárbaros vikingos.
Ah! la fotografía, muy a tono con el título de este blog, es de una valla publicitaria de un buffet creo que en Chicago. Lee "la vida es corta, divórciate". Por supuesto, las autoridades eclesiásticas y la comunidad moralista han puesto el grito en el cielo pero los clientes están llamando a las abogadas...No importa que hablen mal de tí, la cosa es que hablen!
1 comentario:
Desconozco el manual, pero sí he abogado toda la vida por la impartición de educación sexual en nuestros colegios. De hecho, yo la recibí y la agradezco infinitamente. Estuve en un colegio católico.
Una cosa es la inocencia y otra muy distinta la ignorancia. Nuestros niños y adolescentes deben conocer primero su cuerpo, saber todo lo que es capaz de hacer por ellos, que deben cuidarlo, pero sobre todo, respetarlo. Y deben tener siempre presente que el sexo tiene consecuencias, entre ellas las enfermedades venéreas y, en extremo, la muerte. También por su propia seguridad, para que sepan cuándo son víctimas de una agresión sexual. Y, las dudas que no resuelven, por temor a la censura, con adultos responsables, bien documentados y bien intencionados; las resolverán con sus amiguitos, o con la persona que más les parece que sabe y que no los criticará.
Yo hice un trabajo sobre las adopciones y el SIDA en África durante mis estudios en España y me resultó devastador y frustrante comprobar que precisamente la ignorancia es lo que está haciendo que el SIDA esté acabando con África.
Es urgente la educación sexual en todos los colegios del país, pero eso sí, bien orientada por personal debidamente entrenado, no con un mero curso. En mí caso fue una psicóloga y nunca entró en detalle de posiciones, tampoco nos hablaron de sexo anal ni oral, sino que nos enseñaron cómo es nuestro cuerpo, cómo reacciona, qué puede pasar, a qué peligros nos exponíamos, cómo evitarlos, pero principalmente, las consecuencias fisicas, psicológicas, médicas, emocionales y económicas que la práctica irresponsable del sexo puede acarrear.
Saludos y mis disculpas por la intromisión, pero la considero de rigor.
Publicar un comentario