No alcancé a hacer ni siquiera la última llamada de Deportivamente así que ustedes son quienes me van a "oír". Yo no creo que el protagonista fue el árbitro. Desde su ubicación vio que un jugador le saltó encima al otro y el "cantó" lo que vio. Si iba a ser out o no, ya queda fuera de la pregunta, le quitó la libertad al jugador de hacer el lanzamiento. La censura es haber limitado la libertad del otro jugador así que aún cuando sea muy malo el árbitro, hizo bien en cantar lo que vio. Lo que Chiriquí tenía que hacer era pararse bonito. Uno puede después decir, el árbitro me robó el juego pero ahora simplemente lo regalaron. Lo que tenían que hacer era salir y si perdían, pues eran mártires y no olvidemos la fuerza que tienen los mártires. Pero no supieron ser grandes, vieron el chinche en el monte y se perdieron entre las ramas de los 50 mil dólares que les ofrecieron. Tristemente los fanáticos, tal vez aupados por el alcohol protagonizaron lo peor del encuentro.
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